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Clásico de Oro: Rick Wakeman - The Six Wives of Henry VIII


Alcohol + classical music = Rick Wakeman
The guy sure knows how to fuck around while still sounding good, I'll tell you that much. I like how this one is a lot more rock oriented than some of his later stuff, it's not really too hell bent on the concepts, it's just some good ol' keyboard prog. Funny ass album cover

Rick Wakeman is a genius musician, and yet again makes it clear on this album. His masterful strokes on the piano are bone chilling. His speed is mind blowing and every note is a choice, but not only a choice, but the right choice every time. If he had singing chops he'd be the most threatening musician in the world, the scarier version of Elton John. 

Seeing as how this is instrumental and the pieces themselves are fairly indistinguishable from one another, the concept is sorta beside the point. I'm guessing Wakeman is a history nerd and came up with 6 pieces and so the album just named itself. Anyway, if you're a big fan of Wakeman's playing, you'll probably like this. I personally have never cared much for him, despite his undeniably impressive technical skill. Some of the keyboards he uses also have really dorky tones but that probably won't bother your average prog geek.

En mi concepto, un disco "fundamental" del progresivo sinfónico, toda una joya de Wakeman.
@John Winston ///oo\\\

Rick Wakeman, el virtuoso tecladista de Yes, se encuentra en un vuelo de regreso a Londres tras una gira agotadora. En sus manos tiene un libro que tomó prestado en Nueva York: La vida privada de Enrique VIII . A medida que devora las páginas, su imaginación comienza a volar. Cada esposa de Enrique VIII parece hablarle, no con palabras, sino con melodías e imágenes sonoras. Para cuando aterriza el avión, Wakeman ya tiene en mente un proyecto ambicioso: un álbum instrumental que captura la esencia de estas seis mujeres.

Seis almas atrapadas en las teclas del destino

En 1973, Rick Wakeman nos transportó al corazón del siglo XVI con un álbum que trasciende el tiempo y las palabras: The Six Wives of Henry VIII . Inspirado por un libro que encontró por casualidad durante un vuelo, Wakeman tomó las historias de las esposas del célebre monarca inglés y las transformó en paisajes sonoros tan diversos como las vidas que representan.

Ligera introducción:

  • Este trabajo no es solo una muestra del virtuosismo del tecladista, sino una experiencia inmersiva que combina majestuosidad, melancolía y dramatismo. A través de pianos, sintetizadores Moog, órganos de tubos y hasta un banjo eléctrico, Wakeman nos guía por un relato instrumental que, como el reinado de Enrique VIII, está lleno de intriga, pasión y tragedia. Cada pieza del álbum es un lienzo sonoro que dibuja la personalidad de las reinas, desde la turbulencia de Anne of Cleves hasta la solemnidad de Jane Seymour , grabada con un órgano en la Catedral de St. Giles. Es un viaje musical que captura no solo la esencia de estas mujeres, sino también el espíritu audaz y visionario del rock progresivo de la época. Con Las seis esposas de Enrique VIII , Wakeman demostró que la historia y la música pueden entrelazarse de formas inesperadas, creando una obra que sigue resonando como los ecos de un órgano en una catedral vacía: imponente, eterno e imposible de ignorar. 

La construcción de un reino sonoro:

  • Rick Wakeman nos regaló una de las obras más icónicas de su carrera como solista: The six wives of Henry VIII. Este álbum, compuesto por seis cautivadoras piezas instrumentales, rinde homenaje a las esposas del célebre monarca inglés, cada una de ellas es interpretada con un carácter único y un "concepto musical" que refleja su esencia. Con un despliegue magistral de teclados—pianos, clavicordio, órganos, sintetizadores Moog y el inconfundible mellotron—Wakeman teje paisajes sonoros inmersivos donde el virtuosismo se encuentra con la emoción. Entre los momentos más brillantes del álbum destacan “Catherine Howard” , con el peculiar toque de un banjo eléctrico a cargo de Dave Cousins ​​(miembro de los Strawbs); “Anne of Cleves” , un torbellino de energía y dinamismo; y “Jane Seymour” , que nos transporta a otro tiempo con el majestuoso sonido de un órgano grabado en la Catedral de St. Giles. Aunque no sea el trabajo más extravagante de Wakeman, The Six Wives of Henry VIII es quizás su obra más equilibrada, un testimonio del ingenio y sensibilidad de uno de los grandes maestros del rock sinfónico.
Arte interno del álbum donde apreciamos a Wakeman y todos sus "artilugios"

Impresione personal:

  • The Six Wives of Henry VIII es un álbum sencillamente magistral. El concepto y su performance sobrepasan los límites de la imaginación; la versatilidad y la ejecución instrumental, junto con el enfoque de Wakeman, consiguen recrear paisajes sonoros brillantes y complejos. La esencia del ARTE como propuesta fundamental del rock, unida a la opulencia del sinfonismo y las evocaciones progresivas, da forma a maravillas sonoras que parecen resonar en los cielos más altos. Toda esta “maquinación” orquestada convierte “la sesión” en una aventura épica que nos hace vibrar a cada segundo. Desde la energía desbordante de “Anne of Cleves” hasta la solemne y majestuosa “Catherine Parr”, Wakeman logra transportarnos a un éxtasis profundo. Mis impresiones no podrían ser más altas: este álbum cumple su propósito de una manera colosal. Aquí hay un embelesamiento sonoro cautivador, tejido con arreglos virtuosos, cambios de tiempo impredecibles, evocaciones sinfónicas y artilugios progresivos. El concepto de rock sinfónico se plasma aquí con una claridad fascinante, donde cada pieza se convierte en una visión audaz y moderna de la música clásica. Basta con escuchar “Catherine Howard” para entender cómo este estilo puede ofrecernos algo tan cálido y vibrante. Wakeman es un visionario, un arquitecto sonoro que, a través de su arte, nos transporta a territorios inhóspitos donde los ecos sinfónico-eléctricos embellecen el alma. Su arrogancia compositiva nos envuelve y nos obliga a voltear la cabeza, como hipnotizados, cada vez que gira el disco. Podría decir que es un álbum de culto, pero esa etiqueta le queda corta. Este es un trabajo que trasciende los límites del género y se eleva hacia un plano celestial, consolidándose como una verdadera OBRA MAESTRA. Es un álbum tan icónico como la misma portada. Hasta más vernos.  

Mini-datos:

  • La grabación del órgano de Jane Seymour: Para capturar el sonido del órgano de la Catedral de St. Giles, Wakeman tuvo que negociar un horario fuera de los servicios religiosos, grabando en la madrugada. Los micrófonos se colocaron cuidadosamente para capturar la reverberación natural de la catedral.

  • Conflictos con el sello discográfico: La idea de un álbum instrumental basado en figuras históricas fue inicialmente recibida con escepticismo por A&M Records. Sin embargo, Wakeman convenció a la disquera mostrando grabaciones preliminares que impresionaron a los ejecutivos.

  • Dave Cousins y el banjo eléctrico: Wakeman invitó a su antiguo compañero de The Strawbs para agregar un toque inusual en Catherine Howard. El resultado fue tan único que se convirtió en uno de los momentos más memorables del álbum.

  • Presupuesto limitado: Aunque era un proyecto ambicioso, Wakeman tuvo que ajustar los costos, reutilizando recursos de las sesiones de grabación de Yes y contando con la colaboración gratuita de amigos músicos.

01. Catherine Of Aragon
02. Anne Of Cleves
03. Catherine Howard
04. Jane Seymour
05. Anne Boleyn/The Day Thou Gavest Lord Hath Ended
06. Catherine Parr

CODIGO: @



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