Gravy Train - Same
Wonderful debut by this British band. Gravy Train isn't exactly the most progressive band out there, this here is more of a hard rock album, a Tull meets Sabbath hybrid, with heavy guitar riffs from Norman Barrett, and Ian Anderson-like flutes from J.D. Hughes. This is a more aggressive offering than their next album, (A Ballad Of A) Peaceful Man, and no orchestrations either. And there's no "Alone in Georgia" here, which is a plus for me. "The New One" has a rather strong Tull-sound, with some "Living in the Past" type of guitar rhythms to go with it. "Dedication to Sid" (often in reference to Syd Barrett) is a rather odd piece that gets more experimental at the end. "Coast Road" is a blues piece, a bit like _This Was_-era Tull, based on blues riffs and flute. "Enterprise" features some really killer guitar riffs. "Earl of Pocket Nook" is a very extended number that includes lots of guitar solos.I can see where some people prefer their debut over their next album and vice versa, I think both have their merits, they're both great albums.
Hay compilados que son como grimorios, llenos de hechizos dispersos esperando al oído correcto. Super Heavy Vol. 3 cayó en mis manos como caen los buenos presagios: sin previo aviso, sin explicación lógica, como si el destino tuviera su propio DJ oculto. Entre todos los nombres polvorientos del tracklist, uno me llamó con una mezcla de extrañeza y curiosidad: Gravy Train. El título tenía algo de caricatura bizarra, algo entre una banda de dibujos animados y un monstruo salido del fondo de un pantano británico. Pero bastó una sola escucha —una sola— para saber que ese tren no era un chiste. Era un artefacto sónico cargado con flauta encantada, riffs enardecidos y una atmósfera que parecía viajar entre túneles de ácido y estaciones de niebla. No entendí del todo qué me había atropellado… pero supe que tenía que encontrar el disco entero. Ese fue el inicio del descenso.
Hay discos debut que no parecen estar buscando un lugar en el mapa… lo están trazando desde cero. El primero de Gravy Train, editado en 1970, es uno de esos artefactos que no encajan del todo en ninguna vitrina, pero que siguen generando eco entre quienes buscan algo más que etiquetas. Es rock pesado, sí, pero también es un tren fantasmal conducido por una flauta psicodélica y una tensión casi narrativa, como si cada pista fuera un nuevo tramo de un viaje alucinante. Desde el primer tema, el disco no avanza: irrumpe. El bajo y la batería establecen el paso firme de una locomotora eléctrica, mientras la guitarra y la flauta compiten por la dirección del tren. Y no hay concesiones melódicas gratuitas: todo suena urgente, incluso en los momentos más lentos, como si el grupo supiera que este viaje sólo pasa una vez y hay que dejarlo todo en las vías. Escucharlo completo no es simplemente dejarse llevar por una banda interesante de la era Vertigo —es entrar a un universo donde el hard rock, el progresivo y la psicodelia no se pelean, sino que se confunden como sombras en un túnel mal iluminado.
Impresiones personales: Flautas, Cigarros y Clímax
Ha pasado tanto tiempo desde la última vez que escuché el debut de Gravy Train, que volver a él ha sido como desempolvar un viejo abrigo que aún guarda el olor de las noches en que uno creía que el mundo se conquistaba con riffs, cigarros y promesas. Le di play sin muchas expectativas, como quien saluda a un viejo amigo al que no ve hace años. Pero el disco… el disco me sorprendió otra vez.
Había olvidado ciertos pasajes. Fragmentos que hoy me golpearon como si los escuchara por primera vez. El disco no sólo volvió a sonar: revivió. Me hizo pensar en esos días en que uno se curtía a fuego lento con la música, como si cada escucha fuera parte de un rito iniciático. No, Gravy Train no reinventa la rueda progresiva ni vuela las paredes con pirotecnia vanguardista… pero sabe crear un ambiente cálido y prendido, con momentos de clímax que te sacuden, y otros más suaves que te envuelven como una conversación íntima al final de la fiesta. Lo curioso es que, aunque la fórmula no sea del todo innovadora, funciona. A veces irregular, sí, pero siempre con algo que ofrecer. Una vuelta de guitarra bien colocada, una flauta que se cuela por los rincones, una dinámica que te lleva de la mano sin prometerte el cielo, pero sí una buena noche estrellada.
Gravy Train entendió cómo combinar el músculo del hard rock con la veta melódica del folk, y de ese cruce nació un hard prog con perfume de campo mojado, muy a la usanza de los Jethro Tull, aunque sin copiarles el traje entero. La flauta aquí no es un adorno: es parte de la maquinaria rítmica, una compañera de ruta junto a la guitarra, ambas construyendo un sonido saturado de blues y vapor. Es una obra con actitud. Fresca, sin pretensiones grandilocuentes, y sobre todo muy disfrutable. Una joya que no necesita pulirse para brillar: brilla justamente por su textura rugosa, por su honestidad instrumental y por esa vibra de tren nocturno que avanza a fuerza de riffs, vientos y coraje. Lamentablemente, esa esencia tan particular cambiaría pronto. Su segunda entrega, A Ballad of A Peaceful Man, se irá por otros derroteros, más estilizados, más sinfónicos, menos ásperos. Pero esa es otra historia, y ya la contaremos. Por ahora, suban al tren. Acomódense cerca de la ventana. Este viaje merece ser vivido con el corazón abierto y los oídos atentos. Hasta más vernos.
- La banda grabaría cuatro discos de estudio. Los dos primeros fueron lanzados por el sello Vertigo , el resto por Dawn Records .
- *La banda se fundó en Manchester, Reino Unido en 1969 y se disuelve en 1975.
- *Gravy Train fue formada por el guitarrista y vocalista Norman Barratt. Lograron conseguir un contrato con el famoso sello Vertigo. Y su primera salida, acertadamente llamada "Gravy Train", salió a la calle a principios de 1971.
- *Después de Staircase to the Day de 1974 nadie escuchó realmente de ellos ... se rumorea que Barrett vio la luz en
CODIGO: B-32
Gravy Train - (A Ballad of) A Peaceful Man
Este disco es una joya
ResponderBorrarTOTAL mi estimado amigo, una joya que siempre cae bien en las noches de verano acompañado de una buena cerveza fria. Saludos y gracias por comentar.
ResponderBorrarGracias Polilla, un excelente album !
ResponderBorrarDe nada hermano.
ResponderBorrarUn gusto y gracias por comentar... Pronto más novedades.