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Gong - Radio Gnome Invisible: Part 2: Angel's Egg

 

"I kiss your lips.... you die"
A hilarious record that starts great and only gets better and better as it goes on. Also captures everything great about Gong in one album which is really impressive considering how many members and styles they went through.

En el Nombre del Gong
(Prólogo – Segundo descenso al planeta Gong)

En un rincón donde el espacio se pliega
y el tiempo bosteza en clave de sol,
baila el Universo Gong,
hecho de ruido blando
y silencio que canta.

Un planeta hervido en té interdimensional,
donde los Pixies con cabeza de porro
navegan la Oily Way,
guiados por los suspiros
de Gilli, diosa del murmullo astral.

Zero the Hero, sin principio ni fin,
sueña que sueña que sueña,
y en el sueño escucha un libro
que no tiene páginas,
sino ondas.

Un libro que flota,
que zumba,
que ríe
con la risa del Funk Cósmico,
dictando verdades que solo entienden
los que han dejado de buscar

Y en el centro:
un huevo.
Sí, un huevo.
Que no es comida,
sino galaxia comprimida.

Late. Vibra.
Se parte sin romperse.
Y da a luz… esta música.

Así, con un susurro que suena a galaxia,
comienza la segunda travesía.
Shhh… escucha: el Gong está hablando otra vez.

Angel’s Egg: El Lenguaje del Huevo Cósmico

"En esta segunda entrega del Radio Gnome Invisible, el sonido se desliza entre la bruma del Canterbury y la audacia de la experimentación pura, dando forma a una obra que vibra con genio propio. Cada corte no solo narra, sino que teje la historia con precisión onírica, mientras el virtuosismo se filtra sin alarde, desbordando en cada instrumento como si los músicos tocaran directamente desde otra dimensión."

Segundo capítulo de la trilogía Radio Gnome Invisible: 
El huevo en el centro de la espiral

En el epicentro del universo Gong, suspendido como una idea antes del pensamiento, flota un huevo. No es un símbolo. No es una metáfora. Es el mismísimo Angel’s Egg, vórtice radiante donde la música, la mitología y el absurdo se entrelazan como ADN estelar. Zero the Hero —antiguo bebedor compulsivo de té inter-dimensional— ha cruzado el umbral. Ya no es solo un viajero en la órbita de los Pot Head Pixies. Ahora se enfrenta al misterio supremo: el Book of the Cosmic Funk. Un libro que no puede leerse con palabras. Solo se escucha, se sueña, se baila. Y en ese pasaje, Gilli Smyth alza su space whisper, etérea y omnipresente, como si el propio huevo respirara. El Gong suena diferente. La comedia se transforma en rito. La historia entra en su etapa visionaria.

Parte 1 – El viaje de Zero y el Libro del Funk Cósmico
Cartografía mística del absurdo

Angel’s Egg no continúa Flying Teapot: lo trasciende. La historia se vuelve más densa, más sutil. Zero, el protagonista atrapado en un carrusel metafísico, comienza a recibir visiones dictadas por el Invisible College. Los Pot Head Pixies ya no son solo bufones del espacio: ahora son chamanes disfrazados de caricatura, guardianes de un conocimiento antiguo que late entre sonidos. El Book of the Cosmic Funk no es un grimorio ni una novela. Es un plano vibracional. Cada canción, una coordenada. Cada nota, una clave. El mapa está tejido con melodías.

Canciones como portales: El espacio entre los suspiros: Gilli como guía

“I Never Glid Before”: Aquí Zero deja de caminar, deja de volar… glidea. Y con él, nosotros. El riff eléctrico es funk de otra dimensión: crudo, alegre, esquivo. Un mantra disfrazado de jam cósmico.

“Oily Way /Outer temple /Inner Temple/”: El punto donde lo grotesco y lo sagrado se abrazan. Comienza como una travesura viscosa y desemboca en un templo flotante donde Gilli murmura liturgias espaciales. Aquí aparece esa alquimia única de Gong: lo ridículo como puerta a lo sublime.

El universo se expande. Surgen nuevos personajes: los Octave Doctors afinan el tejido del tiempo, el Selene Dreamer guía en silencio los tránsitos astrales de Zero, y las tribus Om flotan en meditación rítmica bajo los satélites de Gong. Gilli Smyth se convierte en médium del misterio. Ya no canta ni declama: invoca. Su space whisper es ahora la conciencia del propio disco. Habla desde dentro del huevo.

Parte 2 – El lenguaje sonoro del huevo cósmico
Música en estado de evaporación

Si Flying Teapot era la comedia psicodélica del té sideral, Angel’s Egg es el sueño lúcido. Las estructuras musicales se vuelven líquidas, flotantes. Nada progresa de forma lineal: se serpentea, se evapora, se transmuta. Gong alcanza aquí una forma más cercana al jazz espiritual que al rock. Steve Hillage despliega su guitarra como si tocara con un arco de luz líquida. Didier Malherbe sopla melodías que parecen surgir de un organismo volador. Pierre Moerlen ya no marca el ritmo: lo respira. Lo sugiere. Y en el fondo, los sintetizadores de Tim Blake crean una atmósfera donde el éter tiene textura. La producción es más delicada, más atmosférica. Gong deja de hacer canciones y comienza a esculpir ambientes. La música no quiere decir: quiere vibrar. En este disco, lo que no se toca también suena.

Impresión general: Un jardín sonoro en el cosmos

Escuchar Angel’s Egg es como entrar a un jardín flotante en el espacio, donde las flores son frecuencias y las piedras filosofales cantan. Es un disco que no te empuja: te envuelve. No te guía: te extravía dulcemente. Y en esa pérdida, uno encuentra algo más parecido a un lenguaje puro. Pero al final, como en todo ciclo místico, se cuela una grieta. Las últimas notas susurran algo inquietante. Como si el equilibrio alcanzado comenzara a temblar. Zero, ahora en pleno trance, siente que una sombra se avecina. Algo que no puede explicarse desde el Libro. Algo que viene desde otra zona del cosmos… más profunda, más eléctrica, más oscura.

Cierre : Se agrieta el huevo, se anuncia la sombra

La historia no termina aquí.
El huevo no se rompe, pero empieza a agrietarse.
Zero siente que lo que viene no será danza ni susurro:
será vértigo, será confrontación.
 
El próximo capítulo se acerca con fuerza:
You, el gran final de la trilogía,
donde el Funk Cósmico se transforma en grito eléctrico
y el Gong despliega su arquitectura definitiva.
 
Continuará…

Mini-datos:
  • La firma del disco: “De Gong para el Gong” Angel’s Egg fue lanzado bajo el misterioso sello “BYG/Charly”, pero internamente el disco está “firmado” por la entidad cósmica del Gong, como si la banda ya no existiera como tal y fuera solo un medio para canalizar los mensajes del planeta Gong. En las notas internas se agradece a “los gnomos del tiempo”, “los pixies que hacen ruido”, y hasta a “la tetera que vuela mejor cuando no la miran”. Porque sí: Gong no firmaba discos, los paría.

  • Grabado en una comuna psicodélica... casi sin saberlo. Gran parte de Angel’s Egg se grabó en el estudio Manor de Virgin, una mansión campestre reconvertida en estudio que Richard Branson había creado como santuario musical. Pero Gong, siempre un paso más allá, usaba el lugar como si fuera su propia comuna: dormían en el suelo, cocinaban curry intergaláctico, y llenaban los pasillos con grabaciones espontáneas de poemas, sonidos de cocina y maullidos. Literalmente, algunas texturas del álbum salieron de conversaciones y bromas grabadas por accidente.

  • Gilli Smyth grabó algunas partes desde otra habitación…porque, según ella, “el huevo cósmico no soportaba el contacto humano directo”. Algunas líneas de space whisper de Gilli fueron registradas mientras ella estaba en otra sala, conectada con micrófonos ambientales. Su idea era no interferir con “la vibración del momento”, convirtiéndose casi en un oráculo que murmuraba desde más allá de la pared.

  • El Book of the Cosmic Funk existe (más o menos) Aunque muchos pensaban que el "Book of the Cosmic Funk" era solo una fantasía dentro de la trilogía, Gong llegó a armar un manuscrito-objeto artesanal con recortes, símbolos, letras sueltas, y dibujos, que circulaba entre los fans más fieles en los años 70 como un fanzine místico. Algunas de sus páginas sobrevivieron y fueron fotografiadas décadas después: contenían mapas sonoros, recetas para alinear chakras con té, y ecuaciones imposibles con dibujos de pixies. Casi un grimorio del absurdo.

01. Other side of the sky
02. Sold on the highest buddha
03. Castle in the clouds
04. Prostitute poem
05. Givin' my love to you
06. Selene
07. Flute salad
08. Oily way
09. Outer temple
10. Inner temple
11. Percolations
12. Love is how you make it
13. I never glid before
14. Eat that phonebook coda

CODIGO: @





Anexo: 

Radio Gnome Invisible: Part 1:Flying Teapot 

Si este té volador te supo a estrellas y confusión, no bajes la taza aún. La historia continúa, más líquida y delirante, en la siguiente entrega: Angel’s Egg, donde los mitos flotan y la música hierve suave, como un huevo cósmico en una tetera de sueños. Sigue escuchando, sigue flotando... Daevid no ha dicho su última palabra.


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